Dirigiendo por ejemplo

coach_JoelcomiskeyPor Joel Comiskey

Si la iglesia va a tener éxito en llevar gente de la celebración a la célula y viceversa, ellos tendrán que ver los ejemplos apasionados del pastor y equipo de liderazgo. No podemos esperar que la gente haga algo que su pastor y los líderes no estamos dispuestos a hacer. Las acciones hablan más que las palabras, y si el pastor y el equipo de liderazgo no están involucrados con pasión en el ministerio celular, los nuevos creyentes pensaran que el ministerio celular es un programa más, en lugar de la columna vertebral de la iglesia. La implicación personal en el ministerio celular también permite a los líderes clave experimentar la evangelización en la célula, el cuidado pastoral, y si es o no la lección celular cumple con las necesidades de la gente. Seguir leyendo «Dirigiendo por ejemplo»

Debo decir no

BillanddebbiemellingerPor Bill Mellinger

Josué 1: 7 NVI – “Sólo te pido que tengas mucho valor y firmeza para obedecer toda la ley que mi siervo Moisés te mandó. No te apartes de ella para nada; sólo así tendrás éxito dondequiera que vayas”.

En un blog anterior, Rob Campbell hizo énfasis en la importancia de saber cuándo decir “Sí”, y cuándo decir “NO”. Como pastor principal, tengo la responsabilidad de establecer la dirección de curso de nuestra iglesia. Cristo nos ha dado nuestra misión a nosotros. Al igual que el capitán de un barco, debo mantenerlos enfocados y en curso. Seguir leyendo «Debo decir no»

De las actividades a las células

mario_vegapor Mario Vega

Antes de realizar la transición para convertirnos en una iglesia celular, Elim era una iglesia saturada de muchas actividades. El corazón de esas actividades era el evangelismo. Había evangelización de casa en casa, en los autobuses, en los cines, en los mercados, en las canchas de juego, en las escuelas y hasta en el aeropuerto. Dondequiera que hubiese un lugar donde las personas se reunieran allí íbamos a evangelizar. Para hacerlo se utilizaban globos, banderas, carteles, marchas, cantos, música, etc. Todo aquello que fuera útil para llamar la atención de las personas. También había pequeños cultos públicos que se hacían en barrios, calles importantes, parques, etc. Seguir leyendo «De las actividades a las células»

“Enfócate”

por Rob Campbell

Al Ries escribe en su libro, Punto Focal, que hay cuatro cosas que podemos hacer para mejorar la calidad de vida y trabajo.

1. Puedes hacer más de ciertas cosas.
2. Puedes hacer menos de ciertas cosas.
3. Puedes comenzar a hacer cosas que no estás haciendo para nada hoy.
4. Puedes parar de hacer algunas cosas por completo.

David Browning en su libro, La simplicidad deliberada (¡un gran libro, por cierto!), comenta sobre las cuatro opciones anteriores. Él escribe: “Mientras que la iglesia tradicional tiende a elegir las puertas 1 y 3, la iglesia Deliberadamente Simple mira lo que está detrás de las puertas 2 y 4. Al hacer menos de ciertas cosas, y dejando de hacer otras cosas por completo, la energía y los recursos pueden ser reinvertidos en las pocas cosas que realmente valen la pena hacer”.

El Pastor Wade Hodges dijo una vez: “Si ser parte de una iglesia coloca a las personas en un entorno que les anima a vivir vidas más frenéticas que las que vivían antes, entonces vamos rumbo a la conducción de la iglesia de manera equivocada”. Browning escribe: “¿Cuál es la cosa más simple que podría funcionar?” Él sugiere que “echemos por la borda otros elementos, incluso si estos han sido tradicionalmente asociados con el progreso”.

Un pensamiento más de Browning: “Una de las preguntas que lleva a la iglesia de vuelta a lo básico es, ¿cómo trabajaríamos lo concerniente a la iglesia si no tuviéramos electricidad? Tu respuesta, sin duda, te empujaría de nuevo a la esencia de la iglesia y lejos de la artificialidad de la modernidad”.